La carne. Es lo que hay para cenar, ¡ahora más que nunca! Según el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), el consumidor medio cenará más de 220 libras de carne roja y de ave este año. Es la cantidad de carne que llegará a la mesa más que cualquier año anterior. Y aunque el USDA recomienda cinco o seis onzas de proteínas al día, la mayoría de nosotros comerá el doble de esa cantidad.
¿A qué se debe este aumento? Las proteínas encabezan la lista de lo que los consumidores quieren en su dieta y la carne es la forma más fácil de satisfacer esa necesidad. Y aunque la demanda de proteínas de origen vegetal también está aumentando, la carne y las aves de corral siguen siendo la fuente de proteínas favorita de la mayoría de los comensales. La prueba de nuestro amor por la carne está en los pasillos de aperitivos del supermercado local, que rebosan de carne y aperitivos a base de carne. Todas las variedades de golosinas de carne al estilo de la cecina reinan, desde la tradicional cecina de vacuno hasta la de cerdo, pollo, bisonte y pavo.
La producción de carne en EE.UU. aumenta gracias a la expansión de los productores de ganado gracias a los baratos cereales para piensos y al aumento de la demanda, tanto en EE.UU. como en el extranjero. Se espera que la producción nacional también alcance un máximo histórico en 2018.
Pero mientras los productores de carne se preparan para satisfacer la demanda de carne con más oferta y líneas de productos ampliadas, muchos están cubriendo sus apuestas añadiendo productos de proteína no cárnica a su repertorio. Se espera que los sustitutos de la carne a base de plantas aumenten también en los próximos años.
Y, dado que la seguridad alimentaria es siempre una de las principales preocupaciones de la industria cárnica, JBT-Avure ofrece a los productores una de las formas más eficaces de servir alimentos seguros y saludables sin productos químicos ni calor. El procesado por altas presiones (HPP) inactiva los patógenos dañinos y potencialmente mortales, como la E. coli, la listeria y la salmonela, haciendo que los alimentos sean más seguros y conserven su delicioso sabor. Muchos productores de carne utilizan la HPP para las carnes listas para el consumo, los jamones cortados y curados, la carne picada fresca, el pavo picado, el pollo, el salchichón, los perritos calientes y las salchichas, así como para otras muchas líneas de productos.
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