La Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU. tiene previsto facilitar información sobre los minoristas en el caso de algunas retiradas de alimentos. En situaciones en las que los alimentos pueden no estar claramente identificados como parte de una retirada y las personas o los animales tienen un alto riesgo de enfermedad, la FDA afirma que proporcionar información específica sobre los minoristas ayudará a los consumidores a evitar más fácilmente los productos que han sido retirados.
Anteriormente, en la mayoría de los casos de retirada de productos del mercado no se revelaban los detalles a nivel de tienda porque la información sobre la cadena de suministro se considera confidencial.
"Identificar los puntos de venta puede resultar complejo. Puede implicar la obtención de información de múltiples partes de la cadena de suministro, incluida la empresa que retira el producto y los distribuidores intermedios", afirmó en un comunicado el doctor Scott Gottlieb, comisario de la FDA. "Pero también sabemos que esta información puede ser muy importante para los consumidores. Saber dónde se vendió un producto retirado durante las retiradas de alimentos más peligrosas puede ser la diferencia entre que un consumidor vaya al hospital o no."
Bajo el mandato del Comisario Gottlieb, la FDA ha introducido cambios en la seguridad alimentaria, el etiquetado y las medidas reguladoras que parecen conducir a una mayor transparencia en la cadena de suministro, desde el productor y el fabricante hasta el minorista.
Seguridad alimentaria: Pasado, presente y futuro
En el pasado, los fabricantes de alimentos han hecho el trabajo pesado durante las retiradas de alimentos, compartiendo información sobre los productos, los envases, la planta de fabricación y los números de lote de los productos afectados. Los minoristas también han desempeñado un papel, retirando los productos de las estanterías lo antes posible y bloqueando el código UPC del producto para que no se escanee en la caja registradora. Y en esta era digital, los datos de las tarjetas de fidelización se utilizan para identificar a los consumidores que compraron artículos retirados e incluso pueden notificárselo en su próximo recibo de compra.
Pero hay productos que se venden durante días antes de que se notifique la contaminación, y otros no tienen un envasado estándar o de fábrica. Los artículos a granel, los productos agrícolas y los productos hechos en la tienda encajan en esta categoría. En el verano de 2018, la FDA publicó información detallada sobre la distribución minorista por estado durante un retiro de melón precortado asociado con un brote de infecciones por Salmonella para que los consumidores pudieran identificar mejor dónde se pueden haber comprado los alimentos retirados.
Desde el fabricante hasta el minorista, la seguridad alimentaria seguirá siendo de vital importancia para todos en la industria alimentaria. Con prácticas rigurosas de seguridad alimentaria y tecnologías como el procesamiento a alta presión y el seguimiento mediante blockchain, esperemos que las enfermedades transmitidas por los alimentos sean cosa del pasado.

